Proyecto: Monona Terrace (puede ser de Wright?)

por: Carlos Enrique García Velásquez

Proyecto: Monona Terrace (puede ser de Wright?)

Numerosos son los proyectos que quieren resurgir de diestros arquitectos del siglo pasado; un Antonio Gaudí en el desaparecido World Trade Center, o ejemplos del futurismo italiano con los parques de Disney y filmes de Pixar, etc… ahora existe tecnología para enaltecer algunos de estos modelos, el proyecto Monona es un ejemplo sencillo de cómo se llevan a cabo estos con técnicas contemporáneas. Esta edificación es un centro de convenciones, abierto hace más de la década, casi 40 años después de la muerte del maestro Wright.

La Terraza Monona un proyecto que ya había pasado por la genialidad de Frank Lloyd Wright, él aparece al centro de la fotografía tomada en los años 50s, donde el maestro muestra el complejo urbanístico a el alcalde y un miembro de la comisión de la Terraza. Este proyecto se ha erigido en Madison, Wisconsin, construyéndolo finalmente a los 59 años de la primera propuesta.

Originalmente los vecinos y representantes políticos querían un conjunto de oficinas y cortes con el Lago Mendota y este unido con el bulevar “three-block-long” que lleva hasta el “capitol” estatal, la comunidad principalmente quería que Wright manejara este proyecto, querían que se volviera un icono y el lugar convenientemente estratégico daba lugar a un resultado dotado de hermosura, Wright empieza a esbozar una de las ultimas y más grandes visiones, mientras deduciendo las calles del cuadrángulo del “capítol” por huellas y abriéndolos hacia un gran hemiciclo de jardines y fuentes que caminan en una grada elegante abajo hacia el borde del agua. El tamaño y situación de las fuentes hacen eco del “capitol” por los domos, mientras tejiendo el “capítol” y la explanada juntos en una sola, urbanamente es una descascarada y osada composición.

Rompiendo las ataduras que impedían realizar el plan; por la década de los 90’s cedió suficientemente para levantar la edificación, moldeando como grandes olas de hielo junto con las cárceles redondas que caracterizan las molduras exteriores e interiores de la constitución propia de esta obra de arte; áreas accedidas por los escalones dentro de poderosos malecones, muchos piensan que varios espacios no son propios de Wright; principalmente del interior, pero a razón de pocos críticos los cambios son comunes y de oficio “mientras sean pocos”, mas en teoría se mantiene la visión magna del maestro, el concepto básico y la representación morfológica.

El arquitecto vuelve a escribir las Bellas Artes con técnicas y códigos, proponiendo los domos semi-transparentes, piedra, baldosas, y cubriéndolos con los motores de reacción de agua para que los espacios interiores debajo del conjunto constantemente se manchen con la luz de agua-filtrada. Wright talla aperturas grandes y un gran escalón en la planicie de la cima exponiéndolo a un jardín fraccionado en diferentes niveles. En la denominada segunda Terraza, esta cota es la más alta de tres niveles del conjunto separando funciones del inmueble con las de la ciudad. Él pone una sala de conferencias cívicas en un elemento hemisférico bajo el domo más grande, central y las salas del tribunal en dos niveles independientes en el interior que cierra con llave las formas encorvadas bajo los domos del frente al lago. Un anillo enorme de oficinas al lado del lago y se afila al hemiciclo, ofrece vistas del jardín.

En las salas del tribunal pueden entrarse en la terraza más baja y más ancha dónde Wright planea un bulevar abrazando al edificio, que se ensambla a una autopista, planeada para un futuro, las rampas conectan el bulevar, hasta una estación de tren que también esta contemplado, amarres a botes en la terraza mas baja, mas esto la tendencia de sus proyectos a entrar ferozmente por encima del presupuesto, y al final no es más que por un conflicto de intereses, unos supuestos problemas legales, intervenciones políticas, etc… que queda postergada hasta los noventas y de esta forma el tiempo se encargo de la burocracia y de esos dinosaurios inútiles, así mismo permitió que en el proyecto se levantara con elementos estructurales de luces muy grandes.

El edificio que finalmente abrió en el 1997 de julio, 38 años después de su muerte, no es la megaestructura que exactamente Wright planeó, son cinco niveles que sumando son unos 76200m², con modificaciones internas, pero las concepciones primarias quedaron de pie, mientras otros aniquilan bosque para levantar edificios, el maestro pretende integrar un espacio libre para unificar la ciudad, el lago con una respuesta arquitectónica única, como una extensión del boulevard se extiende el oasis del tejado ajardinado que es maravilloso, incluso sin los domos de vidrio dramáticos de Wright con sus fuentes y esculturas. El edificio entero tiene un perfil de noche intrigante, sobre todo cuando visto de por el Lago Monona derrama luz del Capitol, el boulevard y la terraza mas una ciudad casi en segundo plano, reflejado en el agua como papel de plata es una estampa realmente bella.

Comparado con los centros de convenciones en otras ciudades, tiene un sello, y nos permite ver a Wright como un urbano visionario, ahora este edificio es parte del paisaje, visto en postales o documentales... Qué captura nuestra imaginación? sobre el trabajo de Wright, puede ser su afición por rebasar los límites del juego entre los clientes, las “autoridades”; y para su propio intelecto.

La Terraza de Monona revela el ser de este genio que pone normas que estén cerca de la rebeldía o para algunos imposible de comprender, aunque hubiera sido extraordinario que se mantuviera el plan al pie de la letra, por lo menos las distribuciones, el concepto y la forma original lo hicieron.